ENERO 2015_ INFORME Reciclaje de llantas

March 27, 2018 | Author: Anonymous | Category: Trabajos y Tareas, Industria y Materiales
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Estudios Económicos

RECICLAJE DE LLANTAS: MAXIMIZAR SU VIDA ÚTIL Y DESECHARLAS CORRECTAMENTE

Análisis: Unidad de Estudios Económicos de Colfecar

Introducción Con el reciente incendio de 600.000 llantas acumuladas en una bodega en Fontibón (Bogotá), la contaminación en el sector excedió cinco veces el máximo fijado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). La quema de llantas desintegra el caucho liberando además de monóxido y dióxido de carbono, dióxido de azufre, que en la atmósfera se puede convertir en lluvia ácida. Además de declarar alerta naranja y estudiar una demanda por el daño ambiental causado, la Secretaría Distrital de Ambiente le pidió a la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales una reunión para plantearle la disposición del Distrito de asumir el manejo y reciclaje de las llantas usadas en la ciudad. Al ser el transporte de carga uno de los mayores generadores de llantas usadas, en el presente informe se expone el ciclo de vida de las llantas, cómo maximizar su vida útil y cómo desecharlas correctamente.

I.

CICLO DE VIDA DE LAS LLANTAS

1) Fabricación de las llantas

Dependiendo de su destinación, los diferentes materiales de las llantas otorgan características como: resistencias a la carga, posibilidad de manejar alta presión, características de adherencia, entre otros. Siguiendo la guía para el manejo de llantas usadas de la cámara de comercio de Bogotá, la composición típica de las llantas radiales se muestra en la tabla 1: caucho, textiles, pigmentos, antioxidantes y rellenos. Tabla 1: Composición típica de las llantas radiales Material Caucho natural Caucho sintético Negro de humo Acero Antioxidantes y rellenos

Composición (%) Automóviles Camiones 14 27 27 14 28 28 14 15 17 16

Fuente: Cámara de Comercio

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2) Etapas

Como se muestra en la Ilustración 1: Ciclo de vida de las llantas todas las etapas del ciclo de vida de las llantas requieren del uso de materias primas e insumos, a la vez que se generan residuos, desechos o subproductos que si no son debidamente manejados pueden afectar negativamente el medio ambiente. El consumidor de llantas puede influir solamente en las dos últimas etapas: el tiempo de uso que depende del cuidado y buen uso; y la reutilización, reciclaje o disposición. Es esta la razón por la cual las siguientes dos secciones tratan estos dos temas. Ilustración 1: Ciclo de vida de las llantas

Fuente: Cámara de Comercio

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II.

MAXIMIZAR LA VIDA ÚTIL DE LAS LLANTAS

Extendiendo la vida útil de las llantas se minimiza el uso de materias primas y desechos. A continuación se exponen algunas prácticas que aumentará la vida útil de sus llantas:

1) Correcto almacenaje

Para mantener las características iniciales y evitar daños o pérdidas, las llantas se deben almacenar en un lugar ventilado, seco, templado, evitando el sol y la intemperie. Asimismo, se deben alejar de sustancias químicas, cualquier objeto que pueda romper el caucho (puntas de metal, madera) y superficies que absorban el calor como el asfalto o superficies reflectivas como la arena. Del mismo modo, para evitar la deformación de las llantas no se deben apilar demasiadas; y cuando no se usen por más de un mes, se recomienda eliminar el peso elevando el vehículo o retirándolas para almacenarlas adecuadamente.

2) Verificación de la presión interna

Las llantas pierden naturalmente aire, por lo tanto se debe revisar la presión interna una vez al mes para asegurar el desempeño y durabilidad de la llanta, además de ahorrar combustible. La presión del aire debe ser acorde con la recomendada por el fabricante; por lo general la presión recomendada para cada vehículo se encuentra en los laterales de las puertas, la guantera o el manual. La revisión de la presión se debe realizar cuando las llantas están frías, es decir cuando hay quietud por más de dos horas o se ha recorrido menos de 3 km; si no es esto posible, se le debe sumar a la presión recomendada por el fabricante 4,5 psi (“libras”).

3) Inspección y mantenimiento

Los desgastes casi siempre se deben a una incorrecta presión de aire, llantas desbalanceadas y ejes desalineados. Es además necesario realizar una inspección periódica verificando desgaste irregular, arañazos, deterioro de las caras, objetos incrustados, etc. El desgaste irregular se evita mediante la rotación de llantas, que se recomienda realizar cada 9.000 Km.

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También el desbalanceo desgasta la llanta. Es así que cuando una llanta tiene una parte más liviana o más pesada que el resto, se aumenta la tensión sobre las partes delanteras. El desbalanceo se identifica a través del volante, especialmente a altas velocidades. Por su parte la alineación asegura que todas las llantas viajen en la misma dirección y se presente un desgaste parejo. Finalmente es importante mantener buenos hábitos de conducción como evitar curvas cerradas a altas velocidades y no acelerar y frenan fuertemente, para evitar el desgaste de las llantas.

4) Reencauche El reencauche es un proceso mediante el cual se coloca una banda de rodamiento a una carcasa de una llanta usada, generando su reutilización una o más veces. La llanta reencauchada cuesta menos y rinde lo mismo que una llanta nueva; sin embargo no todas las llantas son aptas para el reencauche, por lo tanto al momento de la compra, se debe verificar que la llanta es apta para este proceso. Es importante señalar que entre el 10% y 17% de las llantas no pueden ser reencauchadas, debido al mal estado en que se encuentran en el momento de la inspección. Esta situación es generada por la no cultura de reencauche.

Operaciones para el reencauche

El proceso de reencauche, comienza con la inspección inicial, que consiste en la revisión de la totalidad de la carcasa para establecer si es apta o no para reencauche, es decir, que la carcasa se encuentre en condiciones seguras de operación luego del reencauche. El segundo proceso consiste en retirar los remanentes de caucho de las carcasas. Luego de esto, se prepara la carcasa para devolver la resistencia e integridad a una carcasa dañada o maltratada garantizando que vuelva a servicio con todos los parámetros de seguridad. Así, se reparan las lonas afectadas y se repone el caucho retirado de las heridas de la carcasa, causado en los procesos anteriores. En cuarto lugar, se prepara la banda de acuerdo con el diseño escogido por el cliente y la longitud equivalente al perímetro de la carcasa. En quinto lugar, se protege la carcasa de la oxidación y se incrementa la unión de los componentes en el embandado; este último consiste en aplicar una banda de rodamiento nueva a una carcasa pelada y preparada.

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Finalmente, se aplica calor a la llanta por un período de tiempo a las presiones adecuadas al caucho crudo de tal manera que se vulcanice al punto óptimo de sus propiedades físicas y se obtenga la máxima adhesión del cojín con la banda y la carcasa. Sólo resta la inspección final y terminado para asegurar la calidad del reencauche.

Reducción de costos mediante el reencauche Como se muestra en el Gráfico 1, según la Asociación colombiana de reencauchadores de llantas y afines (ANRE), si el transportador de carga sigue un buen plan de reencauche, puede ahorrar hasta un 48% en costos, comparando la compra de un juego de llantas nuevo con uno reencauchado. Asimismo, esto significa un ahorro aproximado del 10% en el costo total de una flota. Gráfico 1: Ahorro total del reencauche para el transportador COSTO TRACTOMULA COMPLETA DIRECCIÓN TRACCIÓN EJE LIBRE TOTAL

JUEGO DE LLANTAS NUEVAS

$ $ $ $

JUEGO DE LLANTAS REENCAUCHADAS

2,200,000 8,448,000 13,200,000 23,848,000

$ $ $ $ AHORRO $

% AHORRO

2,200,000 3,696,000 5,596,800 11,492,800 12,355,200 48%

Fuente: ANRE

Por otro lado, también existe un ahorro por llanta desde el punto de vista de kilómetro recorrido, equivalente a $3.25 pesos colombianos por kilómetro (Gráfico 2). Para una flota de 20 vehículos, la reducción en costos de operación asciende a $143.000.000 pesos colombianos Gráfico 2: Ahorro por kilómetro del reencauche para el transportador COSTO KILÓMETRO RECORRIDO LLANTAS NUEVAS COSTO LLANTA NUEVA KILOMETROS U$ POR KILÓMETRO PESOS POR KILÓMETRO

COSTO KILÓMETRO RECORRIDO LLANTAS REENCAUCHADAS

COSTO LLANTA U$505+ NUEVA Y LLANTA U$510 U$ 505 REENCAUCHADA KILOMETRAJE 100,000+ LLANTA NUEVA Y 100,000 100,000 REENCACUCHADA U$ 0.00505 U$ POR KILÓMETRO U$ 0.00357 PESOS POR $ 11.11 KILÓMETRO $ 7.86 AHORRO U$ AHORRO EN PESOS POR KILÓMETRO

Fuente: ANRE

US$ 0,00148 $

3.25

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III.

RECICLAJE DE LLANTAS

Al ser desechadas, las llantas que han cumplido con su ciclo contaminan visualmente, atentan contra la salud pública al ser enterradas, almacenadas o destruidas por incineración y generan peligro por ser generadoras de incendios. La quema directa emite gases con partículas nocivas para el entorno. Además, el almacenamiento no sólo implica una pérdida de espacio, recursos y energía, también son espacios que permiten la proliferación de roedores e insectos, sobre todo mosquitos que transmiten por picadura dengue, fiebre amarilla y encefalitis equina. Asimismo, en los rellenos sanitarios las llantas impiden la compactación de residuos y generan inestabilidad por la degradación química parcial que sufren, ya que se demoran más de 100 años en degradarse. En el mundo se ha tomado conciencia de la importancia de recolectar y clasificar los desechos para su reciclaje. Es tal la importancia de este tipo de prácticas, que algunos países han tomado iniciativas que terminan por plasmarse en leyes. En Colombia, gran parte de las llantas se almacenan en depósitos clandestinos, techos, patios de casas, lagos, ríos y calles. Asimismo, las llantas usadas aumentan las dificultades de los botadores de cielo abierto, y los municipios del país con disposición de residuos: Doña Juana en Bogotá, Don Matías en Medellín, y Navarra en Cali. Sólo en Bogotá, el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU), señala que en promedio se generan 18.861 toneladas de llantas al año, de las cuales el 71,9% tiene uso energético (como combustible en los hornos de producción de panela en el noroccidente de Cundinamarca), el 17,2% se reencaucha, el 6,2% tiene uso artesanal, el 2,3% se utiliza para regrabado y el resto se destina para otros usos. Ante la amenaza pública, el Departamento Técnico Administrativo del Medio Ambiente DAMA, como entidad competente dentro del perímetro urbano de la Ciudad de Bogotá, desde el 2000 ha comenzado esquemas en busca de afrontar la problemática generada por las llantas usadas.

1) AGENTES RESPONSABLES

El Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial fija las responsabilidades del productor de la llanta, mediante resolución número 1457 del 29 de Julio de 2010, por la que obliga a los

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productores de llantas a formular sistemas de recolección selectiva y gestión ambiental de las llantas usadas, ubicando a disposición del público puntos de recolección sin ningún costo. Esta resolución aplica para los productores de 200 o más llantas y los importadores de 50 o más automóviles al año. Del mismo modo, la resolución obliga a demostrar que el 25% de las llantas importadas son destruidas correctamente, mediante alguno de los métodos descritos a continuación.

2) EMPRESAS RECICLADORAS

Además de las empresas productoras e importadoras de llantas, es importante resaltar que existen empresas dedicadas al reciclaje de llantas. Varias de ellas reciben las llantas sin costo adicional, pero hay algunas que cobran por la recepción del desecho. Así las cosas, los siguientes pueden ser los métodos para recuperar los materiales que hacen parte de la llanta.

3) Métodos de recuperación de materiales

Fuente: Futuro ambiental

En la actualidad existen varios métodos para recuperar algunos de los materiales presentes en las llantas desechadas y destruir los componentes peligrosos. Entre algunos se encuentran: Termólisis: Por medio de un calentamiento sin oxígeno se destruyen los enlaces químicos. Incineración: La quema de llantas en hornos refractarios es difícil de controlar por las diferentes velocidades de combustión de los componentes y la necesidad de depuración de los residuos. La combustión produce contaminantes perjudiciales para la salud humana, como monóxido de carbono, hollín de xileno, óxido de nitrógenos, dióxido de carbono, óxidos de zinc (especialmente tóxico para la fauna acuática), benceno, fenoles, dióxido de azufre, óxidos de plomo, tolueno, entre otros. Trituración criogénica: En instalaciones complejas, se congela la llanta con nitrógeno líquido y se golpea para obtener el caucho en polvo liberando nitrógeno gaseoso.

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Trituración mecánica: Empleando cuchillas se desmenuzan las llantas obteniendo productos limpios y libres de impurezas, ya que no se emplean sustancias ajenas a las llantas; facilitando la utilización de estos materiales en nuevos procesos y aplicaciones.

Fuente: Reciclair

4) SUBPRODUCTOS

Del proceso de reciclaje se obtiene grano de caucho reciclado (GCR), acero y fibra. Según Reciclair, el 10% de una llanta contiene fibra y nailon (pelusa), compuestas principalmente de poliéster. La fibra de las llantas puede reutilizarse en aplicaciones tales como mezclas de concreto, material de limpieza (debido a su característica de ser altamente absorbente), mezclas y material aislante para tapetes, al igual que en combustible derivado de llantas. El acero se separa y limpia para obtener la mejor calidad de acero con menos de 3% de contaminación de caucho; esto se ajusta a la categoría acero grado 1. Mediante el reciclaje de 250 llantas se puede producir una tonelada de GCR; además el CGR se puede utilizar en carreteras, industria automotriz y general, construcción y otros usos.

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A. CARRETERAS

Fuente: Futuro ambiental

El GCR mezclado con asfalto y materiales vírgenes de cantera, puede ser utilizado en la construcción de vías peatonales, vehiculares, ciclorutas y puentes. Es un material más resistente, elástico y durable que las mezclas tradicionales. Otra aplicación importante y que se utiliza en los Estados Unidos de Norteamérica es el uso de llantas como sistemas insonorizantes en carreteras o autopistas que limitan con viviendas o complejos residenciales. En la ilustración 2 es evidente las ventajas que trae consigo añadir GCR a la mezcla asfáltica. Existen dos procesos usados en la elaboración de concreto asfáltico denominados proceso húmedo y proceso seco. En el proceso húmedo, el caucho actúa modificando el cemento asfáltico, mientras que en el proceso seco, el caucho es usado como una porción del agregado fino. Además del asfalto, los gránulos de caucho se pueden utilizar como: membranas repelentes de agua, sellos para grietas, membranas absorbentes de esfuerzo, barreras acústicas, base de líneas de delineación, Aparatos portables para control de tráfico, ondas y reductores de velocidad, cruces, uniones, descansos y amortiguadores para ferrocarril, barandillas de seguridad para bordes de carretera y reductores de velocidad de caucho Ilustración 2: Efecto de la adición de caucho al pavimento

Fuente: Cámara de Comercio

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Caso en Bogotá

En Bogotá, el DAMA determinó dentro de las opciones de aprovechamiento de las llantas, su uso asfáltico como la opción más viable, gracias a sus ventajas económicas, tecnológicas, sociales y ambientales; además se tuvo en cuenta el éxito de esta aplicación en países como Canadá, Estados Unidos y España. El DAMA delegó al IDU los estudios para comprobar las mejoras técnicas de la mezcla, contratando a la Universidad de Los Andes para ello. En el 2002, la universidad concluyó que la mezcla asfáltica resultante del uso del caucho es de alta calidad, ya que aumenta la vida útil del pavimento, su resistencia a altas y bajas temperaturas y disminuye el desgaste de las llantas al contacto con la superficie, permitiendo quintuplicar su duración. Gracias a este estudio, el IDU dictó la resolución número 3649 de 2009 por medio de la cual hace la especificación técnica para la aplicación del GCR en las mezclas asfálticas, con lo que se formaliza y autoriza la utilización de ésta mezcla en la malla vial de la ciudad de Bogotá. Es por esto que el IDU está implementando esta tecnología en algunos tramos de las obras de la ciudad.

B. CONSTRUCCIÓN E INDUSTRIA

Si los usos para las carreteras parecen amplios, para la industria son aún mayores. Entre las aplicaciones se encuentran: material de cimentación, cubierta para tejado, pisos industriales y aceras, alfombrillas antiestáticas para computador, barreras acústicas, aislante acústico, techumbre rociada, aislamiento e impermeabilización, selladores adhesivos, discos de

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ensamblaje y absorbentes de golpes, protección de membrana, pistas de campos de aviación y suelas de zapatos, aislante de tapetes, superficies para parques infantiles, coberturas para parques infantiles, espuma flexible, rodillos, recubrimiento para estanques, compuesto para moldura por compresión, compuesto de moldeamiento para productos de caucho, compuesto para moldura por inyección, llantas sólidas para equipos industriales, faja transportadora; además, puede combinarse con una gran variedad de plásticos.

C. AUTOMOTRIZ

Para el transportador de carga por carretera existen productos derivados del reciclaje como: tapetes para plataforma de carga de camiones, relleno en manufactura de llantas nuevas, reencauchado de llantas, llantas sólidas y con neumáticos, absorbentes de derrames de aceite, tapetes de piso, pantallas, fajas moldeadas de protección, frenos especiales de fricción, sellos para ventanas y puertas de automóviles, llantas segmentadas adaptables a todas las pistas, tapones, selladores adhesivos, sellador aplicable en spray para cajas de llantas de automóviles, barra para parachoques de vehículos, pisos para bandejas de camiones y cuerpos de volquetes.

D. USOS DIVERSOS

Entre otros usos del GCR se encuentra el sustrato para jardinería, en superficies de canchas de fútbol sintéticas, tuberías agrícolas, macetas y artesanías.

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IV.

CONCLUSIONES

Demostrando la responsabilidad ambiental del sector, al momento de comprar las llantas el transportador de carga por carretera debería verificar que la empresa preste el servicio de recolección de las llantas usadas. En caso de no contar con este servicio, el transportador debería comunicarse con una empresa recicladora, pero jamás desechar las llantas inadecuadamente. Asimismo, el transportador puede optar por aumentar la vida útil de las llantas accediendo al reencauche. Esta opción significa la reducción en costos de operación de $143.000.000 pesos colombianos para una flota de 20 vehículos. De esta manera, no sólo se ayudará al medio ambiente, sino que se contribuirá al uso de las llantas recicladas como materia prima para carreteras, industria automotriz y general, entre otros usos. Principalmente, el caucho derivado del reciclaje se puede utilizar en el asfalto de carretera. Esto aumenta la vida útil de las llantas, generando al fin y al cabo un ahorro en costos para el transportador.

V.

BIBLIOGRAFÍA

Alcaldía mayor de Bogotá D.C. Instituto de Desarrollo Urbano, Universidad de Los Andes, “Estudio de las mejoras mecánicas de mezclas asfálticas con desechos de llantas”, Septiembre 23 de 2002, Bogotá. Consultado el 28/11/2014: [http://www.idu.gov.co/web/guest/tramites_documentos?p_p_id=20&p_p_action=1&p_p_state=exclusive &p_p_mode=view&p_p_col_id=&p_p_col_pos=0&p_p_col_count=0&_20_struts_action=%2Fdocument_libr ary%2Fget_file&_20_folderId=21&_20_name=estudio_de_mezclas_asfalticas2.pdf] Cámara de Comercio de Bogotá, “Guía para el manejo de llantas usadas”, Primera Edición, Septiembre de 2006. Dr. Hernando Díez Vargas, Presidente Ejecutivo de la ANRE, “El Reencauche y la Reducción de Costos en el Transporte”, Presentación, Noviembre 2014. Ministerio de Ambiente, Vivienda y desarrollo territorial, Resolución 1457 del 29 de Julio de 2010, “Por la cual se establecen los sistemas de recolección selectiva y gestión ambiental de llantas usadas y se adoptan otras disposiciones”.

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